
El culebrón de Twitter cuenta con otro episodio. En esta ocasión, la junta directiva de la red social de microblogging va a tener un cambio significativo, ya que Jack Dorsey, uno de los fundadores, ha decidido dejarla y así dar un paso más y definitivo en el distanciamiento que venía haciendo con la compañía.
La decisión de uno de los fundadores de Twitter entró en vigencia ayer, miércoles, después de la reunión de accionistas de la compañía.
Hay que recordar que Dorsey ya había comenzado a distanciarse de Twitter hace unos meses. En concreto, el fundador de la red social había dejado su cargo de director ejecutivo a finales de año para así poner todo su esfuerzo y empeño en otro proyecto: Block, antes conocido como Square.
No es sorprendente que Dorsey deje definitivamente Twitter, ya que se veía venir como uno de los siguientes pasos, pero es significativo debido a los tiempos que está viviendo la red social, que está en pleno proceso de compra por parte de Elon Musk, fundador de Tesla, que ha puesto pausa la operación para comprobar que no hay más del cinco por ciento de los usuarios falsos en la red social.
La salida de Dorsey es, por tanto, el final de una era, que ha sido muy importante para la red social, ya que el ejecutivo se encargó no sólo de la fundación, sino que también formó parte de la toma de decisiones sobre sus políticas de uso durante el caos político de la administración de Donald Trump, anterior presidente de Estados Unidos.
De acuerdo con TechCrunch, en la reunión de accionistas, la junta de Twitter votó para expulsar al miembro y aliado de Musk, Egon Durban, director ejecutivo de la firma de capital privado Silver Lake.
Se trata de otro paso más en el culebrón de Twitter, que comenzó con la fuerza de Elon Musk, que se convirtió en accionista mayoritario de la red social de microblogging. Poco después, el fundador de Tesla y SpaceX dio otro paso más y ofreció 43.000 millones de dólares para comprar Twitter, aunque tuvo que subir su oferta a los 44.000 millones de dólares para que finalmente se diera el sí a esta operación. Pero hay que esperar para saber cómo se va a solucionar todo este culebrón de Twitter, ya que Musk ha paralizado temporalmente la compra de la red social para conocer exáctamente los datos de los usuarios y saber si hay más bots de los esperados. Muchos analistas consideran que este movimiento de Musk no es más que una estrategia para poder conseguir un mejor precio de compra.