
Rodrigo Esteban Icaza García es director ejecutivo dentro de la Cámara de Comercio Digital y Blockchain de Panamá y recientemente ha conversado con TodoStartups sobre diversos temas de la labor que realiza la asociación, así como del ecosistema emprendedor en ese país.
¿Cómo es la labor que realiza dentro de la Cámara de Comercio Digital y Blockchain de Panamá?
Primero, habría que definir qué es un director ejecutivo para luego identificar cómo es su labor. Basado en su significado, el director ejecutivo es el cargo de dirigir acciones que sean ejecutables para lograr objetivos y metas específicas. En ese sentido, un director ejecutivo debe ejecutar acciones, de modo que se genere un impacto en el entorno, según los resultados planificados y esperados.
Este proceso conlleva planificación de estrategias que harán más viables la gestión de procesos.
Dicho lo anterior, las estrategias que, desde la Cámara de Comercio Digital y Blockchain, se han desarrollado en una primera etapa (en sus primeros 5 años: 2018-2023) ha sido la de sensibilizar y fomentar la transferencia de conocimiento en materia digital en los diversos grupos de interés para la Cámara.
Esto se refiere a que hemos ejecutado acciones de facilitación y capacitación a miembros del gobierno panameño, así como con empresarios y colaboradores de empresas privadas. Permitiendo que exista un nivel de conocimiento balanceado entre estos grupos de interés con el propósito de que identifiquen entre sus necesidades, cómo las soluciones planteadas con los temas que maneja la Cámara les aporta valor y les brindan oportunidades de desarrollo.
De estas acciones de facilitación y capacitación, se desprenden otras, como son la de guiar, orientar, acompañar, asesorar en el desarrollo de proyectos disruptivos y/o en alguna materia específica como puede ser la financiera, contable, legal, estratégica u otra según la necesidad de quienes se encuentren interesados en mantener una relación con nosotros.
Pasada la primera etapa, nos toca valorar con nuestros grupos de interés, con el fin de pasar a la segunda etapa que consiste en el desarrollo de otras estrategias que refuercen los resultados de la primera etapa y se desarrollen de manera productiva, siempre manteniendo la eficiencia como eje central de ese desarrollo.
¿Tiene cultura la población panameña de criptomonedas o ecosistema Blockchain, en sentido general? ¿Tienen alguna directriz desde la Cámara de Comercio Digital y Blockchain para promoverla?
Hace 6 años cuando iniciaron las comunidades locales a establecerse con solidez, era muy poco conocido en Panamá, el tema de criptomonedas. Prácticamente nadie hablaba de ello. No obstante, había personas aisladas, mayormente, extranjeros o personas vinculadas con computación que conocían del tema.
Desde aquel momento, comenzamos un movimiento masivo por difundir el conocimiento en esta materia, pero a medida que avanzábamos, nos percatábamos de personas que se acercaban a nosotros con preguntas puntuales como “si Paypal funcionaba” o “si Bitcoin era una pirámide” debido a la manera cómo otras personas exponían sobre las criptomonedas. Posteriormente, comenzamos a identificar temas relacionados con fraudes, estafas y hacking, en el que el resultado era la pérdida de fondos.
Estos representaban indicios de que las personas no estaban lo suficientemente conscientes de la tecnología como tal, ni de los riesgos que conllevaba utilizarla. Por lo que, como resultado de este análisis, debimos hacer un alto y replantearnos, si continuar en la vía por la que íbamos o disminuir el nivel de educación para lograr mejores resultados.
En consecuencia, nuestra decisión se basó en hablar del proceso de transformación digital, lo cual nace desde la alfabetización digital. Es decir que, los individuos sean lo suficientemente conscientes de los procesos digitales en un entorno personal y luego, proyectado a su entorno social y corporativo.
Aunado con lo anterior, se debe resaltar que la pandemia nos ayudó a reforzar el mensaje de la importancia por transformarnos digitalmente, por lo que, en la actualidad, las personas son mucho más conscientes de los procesos digitales y su impacto en nuestra vida diaria, con lo que fortalece nuestra cultura digital. Y, además, esto permite que las personas sean más conscientes del uso de criptomonedas.
Por otra parte, en la Cámara no tenemos una directriz de promoción de criptomonedas, sino que se analizan las variables de nuestros grupos de interés para identificar y definir acciones concretas, según las necesidades que estos detecten.
Recientemente, se han debatido varias iniciativas legislativas entorno al ecosistema financiero, ¿pudiera usted describir una y otra? ¿Es posible que ambas puedan coexistir? ¿Qué ha propuesta la Cámara de Comercio Digital y Blockchain?
Es oportuno que, en la actualidad, en nuestra Asamblea se debata sobre criptomonedas. De hecho, sentimos que nuestra Asamblea tiene una deuda con el ecosistema desde el 2017, cuando se propuso un anteproyecto de ley “de modernización y competitividad internacional del sistema financiero de la República de Panamá”, el cual no fue aprobado, debido a que en aquel momento, nuestros representantes gubernamentales al frente de las instituciones responsables de regular la materia tuvieron dificultades en la comprensión de los temas propuestos por aquel anteproyecto y que, además, el mismo tenía en su contenido muchísimos conceptos nuevos que trajeron confusión en el debate.
En la actualidad, debo reconocer que lo que motivó a que en Panamá se presentaran estas iniciativas fue la decisión del Presidente de El Salvador por utilizar Bitcoin como moneda de curso legal.
Ahora mismo, existen 5 iniciativas en la Asamblea, entre los cuales hay 3 proyectos de ley y 2 anteproyectos de ley.
Desde la Cámara hemos manifestado comentarios específicos sobre las propuestas de ley, sin tomar una posición como tal, toda vez que el enfoque de nuestra Asociación se basa en la imparcialidad, no obstante, se sugirió que exista un texto único en cuanto al contenido de las propuestas de ley, descartando aspectos que no estén relacionados con el espíritu del ecosistema cripto.
Y adicionalmente, separar temas que, aunque pueden tener relación, su contenido técnico es mucho más profundo. Por lo tanto, lo ideal es que, si va a existir una regulación relacionada con pagos digitales, sea únicamente de pagos digitales, así como para Fintech y, también, para criptomonedas. Ya que, incluir temas diferentes en una sola propuesta, genera confusión y se puede perder el sentido inicial de la propuesta.
Adicionalmente, se deben considerar normativas internacionales que impactan, directamente sobre el tema de criptomonedas, como pueden ser las normativas GAFI, o de la Unión Europea, las cuales de tiempo en tiempo, nos colocan en alguna lista discriminatoria.
En ese sentido, debe existir la suficiente capacidad para desarrollar una normativa, lo suficientemente cónsona con nuestra realidad local, pero también basándonos en nuestras relaciones internacionales, en materia de cooperación para compartir información específica.
Panamá será sede del Blockchain Summit Latam 2022, ¿cómo marchan los preparativos?
Las expectativas del Blockchain Summit Latam 2022 son altas, considerando que este evento se iba a realizar en el año 2020, pero 24 – 48 horas de iniciar el evento, nuestro Ministerio de Salud canceló la realización de eventos masivos, por lo que la organización en aquel entonces tuvo que realizar devoluciones y buscar alternativas oportunas para las personas que ya se encontraban en Panamá.
En ese sentido, estamos lo suficientemente conscientes de que el Blockchain Summit Latam genera un impacto importante en nuestra economía local y, sobre todo, la turística, ya que al ser Blockchain, Bitcoin y las criptomonedas, temas de interés mundial, colocan a Panamá en el mapa de atracción para conocer qué es lo que se está haciendo, identificando así, maneras de invertir en nuestro país.
Esto lo hemos transmitido a nuestros aliados gubernamentales, al indicarles que no queremos que el Blockchain Summit Latam sea un evento privado, sino que sea un evento con la marca Panamá. Y, en consecuencia, afortunadamente, hemos tenido buena recepción por parte de los miembros gubernamentales que nos han apoyado en el desarrollo del evento.
En ese sentido mencionar que, durante el evento, estamos preparando diversas acciones como conferencias y talleres simultáneos, rondas de negocio, conversatorios y diálogos con representantes gubernamentales, de manera que los inversionistas y empresarios que lleguen al país tengan la oportunidad de conocer por parte de las autoridades nacionales, cuáles son los beneficios de establecer su empresa o capital en Panamá.
También, hemos logrado cerrar un incentivo económico por parte de El Fondo de Promoción Turística (PROMTUR) para la realización de este evento, lo cual refleja el interés por parte del gobierno por reactivar el sector turismo en el país, el cual trae grandes beneficios económicos.
¿Cómo es el ecosistema startapero panameño? ¿Existen políticas públicas de apoyo para startups?
El ecosistema de Startups en Panamá es bastante dinámico y continuamente se están desarrollando actividades de promoción de estas, fortaleciendo así su crecimiento y desarrollo.
En Panamá existen diversas políticas de apoyo a las startups, mayormente, respaldadas por la Autoridad de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (AMPYME), la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SENACYT), la Caja de Ahorros, entre otras instituciones que están comprometidas con el fomento y desarrollo de negocios emergentes en el país y que otorgan incentivos económicos como capital semilla para la puesta en marcha del nuevo negocio.
Adicionalmente, a estos incentivos, las entidades privadas, especialmente bancos, se han inclinado por potenciar el sector de las PYMES, mediante acciones de capacitación sobre diversos temas organizacionales para favorecer el desarrollo de conocimiento del emprendedor.
Por su parte, las comunidades locales de emprendimientos también ejercen un rol importante, toda vez que conectan a los emprendedores con las oportunidades que ofrece el gobierno y, a su vez, la empresa privada, garantizando que el emprendimiento tenga un crecimiento sano.
No obstante, a pesar de estos esfuerzos que se han mencionado, se necesita que todo emprendedor sea disciplinado y aprenda a desarrollar una estructura de funcionamiento sólido, toda vez que para que un emprendimiento realce en Panamá, necesita firmeza y determinación o lo que traduciríamos como carácter, ya que los beneficios que se otorgan vienen acompañados de procesos burocráticos, para los cuales el emprendedor puede no estar preparado, haciendo que en el tiempo se pierda el interés en mantener el negocio en Panamá, dando paso, en el peor de los casos, a la muerte del emprendimiento, o en el mejor de los casos, termine saliendo del país para consolidarse en otras jurisdicciones y sean incluidos en incubadoras extranjeras.
Dicho lo anterior, se debe mencionar que hace falta un mayor esfuerzo por garantizar que estos emprendimientos se queden en Panamá y reciban todo el apoyo (sobre todo de acompañamiento y no solo monetario) por parte de las entidades mencionadas anteriormente, sobre todo cuando son emprendimientos que pueden tener requisitos adicionales por leyes especiales o, en el peor de los escenarios, con zonas legales grises, en los que claramente, se hace necesaria la introducción de una nueva normativa o la modificación de alguna vigente para abrazar este tipo de emprendimientos, como pueden ser las FINTECH o de criptomonedas.