Por Redacción - Dic 22, 2025
El cierre del ejercicio de 2025 marca un punto de inflexión histórico para la industria tecnológica española, personificado en el éxito de la compañía burgalesa Hiperbaric. La firma, que ha sabido posicionarse como la referencia absoluta en el diseño y fabricación de equipos industriales de altas presiones, proyecta concluir el presente año con una facturación récord de 86 millones de euros. Esta cifra supone un incremento del 12% respecto a los 77 millones obtenidos en el periodo anterior, consolidando una tendencia ascendente que no solo responde a la recuperación de los mercados globales, sino a una capacidad de innovación que parece no conocer techos técnicos ni geográficos. La solidez de estas previsiones se fundamenta en un modelo de negocio diversificado que ha permitido a la entidad alcanzar un EBITDA de 26 millones de euros, superando en un 8% los registros de 2024 y demostrando que la eficiencia operativa puede caminar de la mano con la expansión internacional más ambiciosa.
Andrés Hernando, máximo responsable de la compañía, ha enfatizado que estos resultados son el fruto directo de una estrategia de largo recorrido donde la confianza del cliente y la excelencia tecnológica son los pilares maestros. La evolución de las ventas consolidadas en el último trienio revela una progresión asombrosa del 44,4%, escalando desde los 53,3 millones de euros facturados en 2021 hasta la robustez financiera actual. Este crecimiento se reparte de forma estratégica entre sus distintas divisiones, donde la tecnología de procesado por altas presiones destinada al sector agroalimentario continúa siendo el motor principal, aportando 75,5 millones de euros a la caja común. No obstante, el verdadero valor diferencial de Hiperbaric reside en su capacidad para colonizar sectores de alta complejidad técnica, como la compresión de hidrógeno verde y el prensado isostático en caliente, áreas que ya empiezan a reportar beneficios millonarios y que aseguran la relevancia de la empresa en la transición energética global.
El dominio del mercado que ejerce la firma desde su sede en Burgos es indiscutible, controlando actualmente el 65% de la cuota mundial de equipos de procesado por altas presiones. De los aproximadamente 700 equipos industriales instalados en todo el planeta, más de la mitad llevan el sello de fabricación española, una estadística que se vuelve todavía más abrumadora en el territorio nacional, donde 8 de cada 10 máquinas en funcionamiento pertenecen a Hiperbaric. Este liderazgo se ha visto reforzado a lo largo de 2025 con hitos de gran calado, como la exportación a Taiwán del primer equipo de tecnología de prensado isostático íntegramente desarrollado en España para la industria aeroespacial. Además, la compañía se encuentra inmersa en la ampliación de sus infraestructuras productivas con la construcción de una nueva nave industrial que albergará el equipo de mayores dimensiones diseñado hasta la fecha, un proyecto que simboliza la escala física del éxito corporativo.
En el ámbito de la sostenibilidad, el año 2025 ha consagrado a la empresa como el líder europeo en tecnologías de compresión de hidrógeno verde. La apertura de mercados en naciones con estándares de ingeniería tan exigentes como Países Bajos, Austria, Suecia y Finlandia avala la fiabilidad de una tecnología que es clave para la descarbonización industrial. La cartera de pedidos en este segmento se ha duplicado en el último año, sumando 52 grupos compresores destinados principalmente a hidrogeneras y transporte logístico a través de tube trailers. Proyectos emblemáticos como el suministro al Centro Nacional del Hidrógeno en Puertollano o la colaboración en el ecosistema de hidrógeno verde de Mallorca demuestran el compromiso de la entidad con la soberanía energética de España. Todo este despliegue de capacidades técnicas tiene un impacto directo en el tejido social, con una previsión de crecimiento de plantilla que alcanzará los 220 empleados en 2026, lo que representa un aumento del 50% en el capital humano en apenas dos años, reafirmando que la tecnología de vanguardia es el motor más eficaz para la creación de empleo cualificado.
